Música
Paul Anka: la leyenda viva que reinventó el swing y el jazz moderno
Descubre cómo Paul Anka, compositor de My Way y estrella del swing, se convirtió en una leyenda del jazz moderno con más de 900 canciones.
De teen ídolo a icono del swing
Nacido en Ottawa en 1941, Paul Anka es uno de esos artistas que desafían el tiempo. Con más de seis décadas de carrera, más de 900 canciones escritas y más de 120 álbumes grabados, se ha ganado un lugar permanente en la historia de la música popular y del swing moderno.
A los 15 años ya era una sensación internacional gracias a su éxito Diana (1957), una balada que vendió millones de copias y lo lanzó como ídolo adolescente. Temas como Put Your Head on My Shoulder y Lonely Boy lo consolidaron como la voz romántica de toda una generación.
Pero lo que hace de Paul Anka una verdadera leyenda del swing y jazz no es solo su voz, sino su capacidad de reinventarse.
El genio detrás de los grandes clásicos
Anka no solo cantaba, también escribía.
Y no cualquier cosa: compuso “My Way”, la versión inglesa del clásico que Frank Sinatra inmortalizó. Esa canción sola bastaría para dejar huella, pero él siguió: también escribió “She’s a Lady” para Tom Jones y Puppy Love para Donny Osmond.
Su talento como compositor fue tan influyente que terminó recibiendo el prestigioso Johnny Mercer Award del Songwriters Hall of Fame, uno de los mayores honores de la industria musical.
Rock Swings: cuando el swing se vistió de rock
En 2005, Paul Anka sorprendió al mundo con el álbum Rock Swings, donde transformó clásicos del rock y pop de los 80 y 90 — como Smells Like Teen Spirit (Nirvana) y It’s My Life (Bon Jovi) — en elegantes versiones swing. El disco fue un éxito de crítica, vendiendo más de 150 000 copias entre Canadá y Reino Unido, y posicionándose en listas de jazz y álbumes contemporáneos.
Este proyecto demostró que el swing no era solo cosa del pasado. Paul Anka lo trajo de vuelta, con la elegancia de Sinatra pero con la frescura de una generación moderna.
Dos años después, volvió al formato con Classic Songs, My Way (2007), reafirmando su título de maestro del swing actual.
Una voz que cruzó fronteras
Anka ha grabado en más de cinco idiomas — incluyendo japonés, alemán, español, francés e italiano — y ha vendido más de 15 millones de discos alrededor del mundo.
Esa versatilidad lo convirtió en un crooner global, uno que puede cantar con alma latina, elegancia europea y corazón norteamericano.
De hecho, pocos artistas pueden presumir haber tenido canciones en listas Billboard en cada década desde 1957. Su legado no solo pertenece al swing o al jazz: es parte de la historia cultural del siglo XX.
La leyenda sigue viva
Hoy, Paul Anka continúa girando por el mundo, manteniendo vivo el sonido del swing con un toque contemporáneo. Su música une generaciones, demostrando que la elegancia no pasa de moda y que un buen swing siempre puede renovarse. Porque, si algo nos enseñó Paul Anka, es que el verdadero arte está en seguir reinventándose sin perder el estilo.
“He vivido la música, la he escrito, la he cantado, la he reinventado. El swing nunca se fue.” — Paul Anka