Música
Billie Eilish: Hit Me Hard and Soft
Descubre cómo Billie Eilish sigue dominando el mundo de la música con su tercer álbum "Hit Me Hard and Soft".
Desde que Billie Eilish lanzó su segundo álbum “Happier Than Ever” hace tres años, ha seguido siendo una fuerza imparable en el mundo de la música. Con su canción ganadora del Grammy y el Oscar “What Was I Made For?” de la banda sonora de Barbie, Billie Eilish, ahora de 22 años, está en todas partes y sus fans están más emocionados que nunca por su nueva música. Recientemente, anunció su tercer álbum, con el título súper intrigante “Hit Me Hard and Soft”. En una entrevista con Zane Lowe en Apple Music, Billie Eilish reveló que ella y su hermano Finneas, su productor de siempre, hicieron este álbum sin preocuparse por lo que pensara la gente.
Pero “Hit Me Hard and Soft” nos trae de vuelta a ese sonido oscuro y dramático que amamos desde su primer álbum. Con ritmos lentos, sintetizadores locos y cuerdas del Attacca Quartet, este álbum no es totalmente nuevo, pero tiene ese toque misterioso que Billie domina. Aquí tienes tres cosas geniales del nuevo álbum:
Nuevos estilos vocales:
Billie es famosa por sus ritmos oscuros, melodías pegajosas y su voz susurrante y siniestra. En “Hit Me Hard and Soft”, juega más con su voz, desde tonos claros y dulces en la alegre “Birds of a Feather” hasta un grito emocionante en “L’ Amor de Ma Vie”. Es increíble ver a Billie explorar diferentes estilos vocales, dando más vida a canciones como “Bittersuite”, donde mezcla sintetizadores con voces de jazz.
Una Billie más relajada y madura:
Una de las canciones más impactantes del álbum es “Lunch”, una atrevida aventura de rock sintético donde Billie confiesa que otra chica es tan sexy que “se la comería para el almuerzo”. Es una canción elegante y divertida, la más entretenida que Billie ha hecho hasta ahora, mezclando su sonido juguetón con un toque más maduro. Esta mezcla de madurez y humor sigue en “The Diner”, donde se pone en la piel de un acosador sobre un ritmo loco de funhouse. Conociendo la historia de Billie con acosadores, esta canción tiene un tono turbio pero fascinante.
Cambios de Beat por todos lados:
Finneas, el único productor del álbum, cambia mucho el sonido en las 10 canciones, a veces incluso en una sola pista. Por ejemplo, el ritmo reggae inicial de “Bittersuite” se transforma en una locura de sintetizadores. En “Chihiro”, inspirada en la protagonista de “Spirited Away” de Hayao Miyazaki, una guitarra eléctrica se ralentiza antes de explotar en un trance final. Billie cambia de géneros y estados de ánimo, reflejando lo impredecible de su mente. La última canción, “Blue”, pasa del pop-rock a una balada de piano, mostrando la rebeldía de Billie en todo su esplendor.
Y a ti, ¿qué te pareció el nuevo álbum?